Este ladrillo alargado captura la esencia de la arquitectura romana clásica gracias a su tonalidad granate profunda y elegante. Meticulosamente desarrollado a partir de estudios de edificaciones centenarias italianas, ofrece un acabado premium con texturas que emulan la acción del tiempo y el sol. Su coloración intensa y cálida proporciona un contraste distinguido en cualquier espacio, mientras sus bordes contemporáneos crean una fusión perfecta entre tradición e innovación. La superficie ligeramente irregular aporta carácter y profundidad visual que evoluciona con la luz natural. Ideal para proyectos residenciales exclusivos o espacios comerciales que buscan distinción atemporal. Complementado por esquineros a juego para acabados impecables.